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Mello (629 m.)

La cima del Mello sobresale cubierta de eucaliptos y pinos en la divisoria de Bizkaia con Cantabria

Viernes, 29 de Mayo de 2015

La cumbre de Mello se ubica en la divisoria entre Bizkaia y Cantabria sobre el Cantábrico. Es una montaña aislada y diferenciada cubierta por un espeso bosque de eucaliptos. También es conocida como El Raso de Mello y Alto de Las Muñecas. En documentos antiguos (siglo XVIII) aparece citada como Melludi y Melludo.

HITOS

  • Mello: 629 m. (UTM:30T 487842.41 E, 4794749.74 N) Puntuable para los Cien Montes.

  • Cómo llegar: A-8/N-634, salida Muskiz. BI-2701 a Mercadillo Sopuerta. Desvío BI-4602 a Montellano.

  • Cartografía: MTN 61-I (Santurtzi), 1:25.000, del IGN.

  • Horario: 2h.35 (1h.10 de ascensión al Mello).
  • Distancia: 7.0 km.
  • Desnivel positivo: 535 m.
  • Severidad del medio: 2
  • Dificultad orientación: 3
  • Dificultad del terreno: 2
  • Esfuerzo necesario: 2
  • Tipo recorrido: Ida y vuelta
Cuenta con numerosos accesos. Los caminos más utilizados son los que suben por La Rabuda, en Muskiz, y por el puerto de Las Muñecas. En esta ocasión salimos de Montellano, barrio de Sopuerta, que se agrupa en la ladera más soleada de la cima. Fue una barriada minera reconvertida en residencial tras el cierre de las explotaciones de hierro. En una casa humilde vivió hasta los 15 años Antonio María de Trueba y de la Quintana (Galdames, 1819-Bilbao, 1889), escritor costumbrista y cronista oficial del Señorío de Vizcaya. Una estatua en los Jardines de Albia de Bilbao obra del escultor Benlliure perpetúa su memoria.La subida no encierra secretos. La carretera asfaltada deja atrás la ermita y el bar y termina frente al depósito de agua. En este punto se interna entre los eucaliptos monocultivo de la zona monte arriba, por una pista de cemento que pronto se vuelve de grava. Siempre entre arbolado, sube y cruza con otra pista (0h.15). Volveremos por ella (izquierda). Va hacia lo alto entre un bosque cerrado de eucaliptos salpicado de pinos. La pista se vuelve senda. Trepa, pasa una zona de tala y, tras superar un tramo muy pendiente, enlaza con el camino forestal que rodea el cerro Llangón (0h.35).La zona está desforestada para el trazado de la línea de alta tensión. Caminamos (derecha) entre una plantación de árboles autóctonos: robles, fresnos, cerezos, nogales... hasta alcanzar el collado entre el Llangón y el Mello (0h.45). Letreros indicadores. De allí parte la pista que sube del puerto de Las Muñecas. La cima del Mello está sobre nosotros (NO). Hay tres pistas que suben, cualquiera de ellas nos lleva al alto. Vamos por el camino que remonta la loma por la derecha. Es de grava, tendido que gana altura primero entre pinos y luego por terreno abierto y nos deja bajo la cima (1h.10). El alto es un raso herboso donde pastan caballos y vacas. Tiene un vértice en el centro. También hay un buzón de hierro colado, macizo, colocado por el Mello MT. Queda la base de otro más antiguo que fue robado.Excelente panorámica del valle de Sopuerta y del estuario del Barbadún, la refinería, el superpuerto, la costa de Castro Urdiales y el mar Cantabrico. Vuelta al collado por alguno de los caminos que suben (1h.30). Ahora bajaremos por el barranco de las minas. Para ello bordeamos el Llangón por la pista de la derecha. Hito (1h.35). Iniciamos un entretenido descenso por el laberinto de pistas forestales que cruzan las plantaciones de eucaliptos.Siempre en dirección suroeste, la pista pierde altura entre arbolado cerrado. Pasa junto a una bocamina cerrada y reutilizada para la traída de aguas y alcanza el paraje llamado Las Peñas de Bolar (1h.55). Son unas rocas que cuelgan sobre el hueco de la mina de hierro de San Antonio, cerrada hace años. El cráter de la explotación se ha inundado y es ahora un pequeño lago en el centro del bosque. La pista sigue en descenso y termina en el depósito de agua. Por asfalto, entre caseríos y perros, alcanzamos el aparcamiento (2h.35). Antes de abandonar Montellano podemos visitar las ruinas de la casa de Antonio María de Trueba. Está en la salida del barrio, bajo la ermita, en un rellano que mira a los Montes de Hierro.

 

 

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