Odoibaltza y Bortaun son las cimas principales de una modesta sierra que cierra el valle de Ayala por el norte y lo separa de Las Encartaciones. Este cordal recibe el nombre del Odoibaltza (corrige el erróneo Idubaltza con el que se conocía hasta no hace mucho) por la cima del mismo nombre. Pese a no ser la más elevada, ya que las mediciones más exactas de los albores del presente siglo trajeron otra corrección. Su gemelo Bortaun es 14 metros más alto, por lo que hace una década le arrebató la condición de Centenario.
Conoceremos en esta ocasión su vertiente sur partiendo de Inortza, uno de los núcleos rurales que conforman Llanteno. Ascenderemos desde allí hasta el cordal cimero, para, tras pisar las dos cimas hermanas, retornar al punto de inicio por el Santuario de La Blanca, que data del siglo XIV y de gran devoción popular. Conviene tener en cuenta que transitaremos por terreno propenso a las explotaciones madereras, con la consiguiente creación de pistas que pueden complicar la orientación.
HITOS
Odoibaltza: 691 m. (UTM:30T 493565.01 E, 4776404.56 N) Puntuable para los Cien Montes.
Bortaun: 705 m. (UTM:30T 494187.00 E, 4775933.00 N) Puntuable para los Cien Montes.
Cómo llegar: Desde Bilbao, corredor del Kadagua (BI-636) has ta Sodupe. BI-2604 por Gordexola hasta el desvío a Llanteno/Amurrio. A-3634 hasta Inortza.
Cartografía: MTN 86-I (Artziniega), 1:25.000, del IGN.
Horario: 3h. 05' (1h.30 al Odoibaltza y 1h 45' al Bortaun)
Distancia: 10.0 km.
Desnivel positivo: 728 m.
Severidad del medio: 2
Dificultad orientación: 2
Dificultad del terreno: 2
Esfuerzo necesario: 3
Tipo recorrido: Circular
En Inortza, dejamos el coche en la pequeña explanada que hay junto al puente, construido en el siglo XVIII sobre el río Ibalzibar para dar acceso a unos de los molinos de Llanteno, una de las grandes fuentes de poder y riqueza en los pueblos en aquella época
Cruzamos a la otra orilla y subimos de frente por una pista cementada, no sin antes acercarnos (izq) al monumento al pastor de la sierra Sálvada Eugenio Santa Coloma Ulibarri, uno de los pastores más famosos del valle de Ayala y conocido como ‘El blanquero’ por haber nacido junto al santuario de La Blanca.
Remontamos la pista hasta un pequeño pabellón. A su derecha desciende un camino carretil por el que bajamos hasta un arroyo. Lo vadeamos y giramos casi 180º para subir por un viejo robledal. Desembocamos en el cortafuegos de una línea de alta tensión. Seguimos el camino que lo recorre hasta salir a una amplia pista (0h.20’) junto a una modesta majada. Subimos por el vial rodeando el Garondo hasta llegar a un amplio collado (0h.35’) en un pinar en plena entresaca, donde debemos seguir una pista que continúa subiendo (izq).
Los pinos dan paso a los eucaliptus mientras rodeamos una vaguada hasta salir al cordal en los límites del bosque. Las recientes talas nos permiten disfrutar de una excelentes vistas de todo el valle y la sierra Sálvada que se prolongarán en toda esta vertiente de Odoibaltza en la que estamos, aunque la repoblación con pinos está ya en marcha. Salimos a otra pista por la que ascendemos hacia la derecha y que no abandonaremos hasta alcanzar el cordal cimero y llegar a la cima de Odoibaltza (1h.35’), con cuidado de no pasarnos el vértice y el buzón (dch). Paradójicamente, las vistas hacia Ayala son desde aquí casi nulas y se limitan al norte, hacia Las Encartaciones.
Seguimos por la pista, que abandonamos cuando empieza a alejarse del cordal. Seguimos por este por una senda hasta un collado. Aquí continuamos (dch) una pista unos metros hasta un pequeño alto, donde una senda (izd) nos lleva hasta el Bortaun (1h.45’). Continuamos por la divisoria, aunque enseguida un pista (dch) nos invita a perder altura rápidamente. Obviando desvíos a izquierda y derecha, llegamos a un amplio cruce de pistas en un collado en medio de un pinar (2h.10’).
Si nos damos por satisfechos podemos seguir por la derecha para bajar directamente al santuario de La Blanca. Los ‘tachacimas’ tienen la oportunidad de sumar otra siguiendo la pista de la izquierda hasta un desvío (dch) por el que ascendemos al Garondo de Menagarai. Una vez en la cima (2h.25’), una sendarecorre el cordal, pero los pinos jóvenes incomodan mucho la marcha. Es mejor volver al camino y seguirlo (E) hasta que desciende en fuerte pendiente a la carretera del cercano santuario (dch, 2h.45’). Desde el templo, solo queda descender por el asfalto hasta Inortza (3h.05).