La ermita de San Felices de Bilibio vigila el desfiladero del Ebro entre los llanos de Miranda y La Rioja. Junto a la peña, al otro lado de la autopista, está el Cerro de la Villa. Es una altura menor coronada por buzón, oteadero privilegiado de los viñedos y Haro.
Cerro de la Villa permite penetrar en un sector de los Obarenes complicado, cubierto por un espeso carrascal de difícil tránsito. Puente sobre la autopista. Cruzamos para caminar por una pista(derecha) prohibida a vehículos no autorizados. Unos minutos después nos desvíamos por un camino (izq.) que sube entre los pinos de repoblación. Termina junto a una antena. Encara la ermita de San Felices y la autopista. Por detrás, una senda trepa entre bojes, llega al roquedo y al Cerro de la Villa (0h.20"), señalado con un Belén y una cafetera como buzón del CM Bilibio.
Vuelta a la pista por la ruta de subida. El camino llega a un cruce. Por la izquierda, entre pinos, alcanza el alto tras un repecho. Allí, un sendero poco claro (izq.) sube entre ramas desgajadas. El pinar deja paso al "maquis" de coscoja, madroño, brezo y boj. Alcanza un abrigo de rocas que destaca de la maleza. Peña Colorada (1h.05"), como ya aparece en el Diccionario de Madoz. Vistas reducidas.
Vamos hacia el borde de la sierra. El tramo es corto, pero penoso. Un sendero de ganado surca el carrascal, que en esta zona aguijonea y cansa. Estos bosques, utilizados para hacer carbón de leña, han rebrotado al disminuir los incendios y la presión del ganado caprino. De hecho, en los mapas antiguos la zona aparece como desarbolada y se llama Las Campas.
Borde de los Obarenes riojanos (1h.25"). Precipicio de vértigo. Los viñedos se extienden hasta Haro y más lejos. Vamos hacia la derecha, pegados al cantil. Una trocha sortea los enebros y lleva a un peñón calizo, cubierto de liquen. Una fácil trepada (F) y pisamos el techo de Peña Colorada o Peña del Mirandés, como también se conoce (1h.30"). Vistas excelentes.
Una canal permite bajar al pinar que oculta la base. Retomamos el sendero para atravesar la espesura del carrascal, alcanzar el abrigo y enlazar con la pista (1h.37"). Cuesta abajo llegamos al cruce (1h.50"). Por la derecha va San Felices. Seguiremos (izq.) por el antiguo camino al monasterio y salinas de Herrera, ahora Yermo Camaldulense de Ntra. Sra. de Herrera. Se remonta al año 1044. En el lugar rige una estricta clausura.
La pista desciende entre pinos y encinas. Un largo tramo sombreado y agradable de cruzar. Huellas de corzo y rastros de jabalí. Cruce (2h.05"). Continúa (dch.) hasta unos llanos que fueron pastizales. La cima de San Formerio aparece en frente. Se ven catas de yeso y la maleza oculta las viejas labores mineras. Extraían hierro que luego era fundido en el cenobio. En las cercanías del convento existe el topónimo "Mina".
HITOS
Cerro de la Villa: 667 m. (UTM:30T 511483.36 E, 4718125.24 N)
Mirandés, Peñas del: 689 m. (UTM:30T 510822.00 E, 4718188.00 N)
Peña Colorada: 649 m. (UTM:30T 511206.00 E, 4718108.00 N)
San Formerio: 686 m. (UTM:30T E, N)
Cómo llegar: AP-68, salida Haro. LR-306 desvío a San Felices.
Horario: 3h.30". (0h.20" Cerro de la Villa; 1h.30" Peña Colorada; 2h.50" San Formerio).
Distancia: 9.5 km.
Desnivel positivo: 525 m.
Severidad del medio: 3
Dificultad orientación: 2
Dificultad del terreno: 4
Esfuerzo necesario: 3
Tipo recorrido: Ida y vuelta
El camino va hacia las salinas. En el punto más alto buscamos un hito (2h.25"), derecha. Señala el inicio de un estrecho sendero que sube recto entre brezo, romero, enebro y gayuba. También algún pino. Remonta metros y nos lleva hasta el collado (2h.40"). Arrimarse a la cima de San Formerio es complicado. El santo nació en Cerezo del río Tirón y es patrón de Treviño. En lo más alto, sobre el precipicio, crece un ciprés, quizá plantado (2h.50"). Un muro rodea el Yermo. El convento, la iglesia arruinada y las salinas se ven debajo, en el fondo del valle.
El retorno no se presta a improvisaciones. Vuelta a la base (3h.00"). Luego la pista lleva al cruce y de allí al puente sobre la autopista y el coche (3h.30").